Lubricación, squirting y eyaculación femenina: lo que hay que saber

¿Sabes distinguir entre lubricación vaginal, squirting y eyaculación femenina? Este artículo lo deja claro. Analizamos cómo responde el cuerpo a la excitación, qué fluidos se expulsan y qué implican para el placer femenino. Desmontamos ideas preconcebidas y te ayudamos a entender mejor tus sensaciones y experiencias. Si buscas respuestas científicas y consejos útiles para potenciar tu bienestar íntimo, aquí encontrarás información clara y fiable. Da el paso hacia una sexualidad más consciente y libre de tabúes.

Qué es la lubricación vaginal

La lubricación vaginal es una respuesta automática del cuerpo ante la excitación sexual. A medida que aumenta el deseo, las glándulas de Bartholin y las paredes vaginales producen un fluido transparente y resbaladizo. Esta mezcla hidrata las paredes vaginales y la vulva, facilitando las caricias y previniendo molestias o irritaciones. Además, este líquido actúa como barrera protectora frente a infecciones. Si la humedad no es suficiente, se puede complementar con lubricantes específicos para mejorar la experiencia.

Squirting: qué ocurre realmente

El squirting es la expulsión repentina de una cantidad notable de líquido claro a través de la uretra, generalmente provocada por la estimulación directa del llamado punto G (parque anterior de la vagina). Este fluido se produce en las glándulas parauretrales (glándulas de Skene) y, en ocasiones, puede llegar hasta la vejiga antes de ser liberado. El líquido es incoloro, inodoro y similar al agua.

No siempre está asociado al orgasmo. De hecho, puede producirse simplemente como una reacción física a la estimulación particular de esa zona, sin que haya necesariamente clímax.

Eyaculación femenina: mitos y realidad

La eyaculación femenina es diferente al squirting, aunque también tiene su origen en las glándulas de Skene. En este caso, el líquido sale directamente por pequeños orificios junto a la uretra y en menor cantidad que el squirting. Es incoloro, no presenta olor, y suele pasar desapercibido por su reducido volumen.

A diferencia de la eyaculación masculina, el fluido femenino no es semen, sino una sustancia única y natural.

Conocimiento para una sexualidad más plena

La lubricación vaginal, el squirting y la eyaculación femenina han estado rodeados de desinformación y tabúes. Hablar de ello abiertamente y conocer cómo funciona el propio cuerpo ayuda a disfrutar de una vida sexual más saludable y libre de prejuicios.

En Climax™, apostamos por la educación sexual basada en la evidencia y te animamos a explorar y compartir tus dudas para promover el bienestar y la confianza en tu intimidad.